lunes, 4 de abril de 2016

Los sentidos



 Sensopercepcion  

 Dra. Valeria Matzkin

“Un poeta para construir sus metáforas tiene que ser profesor en los 5 sentidos corporales: vista, oído, tacto, gusto, olfato en este orden. Para poder ser dueño de las más bellas imágenes, tiene que abrir las puertas de comunicación entre todos ellos... “Federico Garcia Lorca.

La capacidad sensoperceptiva crece y se desarrolla con la practica motivada x el deseo, de modo de disminuir la intensidad del estimulo para agudizar y afinar la capacidad de discernirlo, bajar el umbral y expandir la sensibilidad. 

La sensopercepcion es un mecanismo que permite dar una apertura a todos los sentidos del cuerpo, ya que generalmente no lo hacemos por estar saturados de información visual emitida bajo el descubrimiento de los sentidos: visual, auditivo, kinestesico, térmico, olfativo, etc.; para buscar una actitud consciente y sensible hacia uno mismo. 

La sensopercepción se inicia con la presencia de un estimulo y tiene como objetivo la extracción de información que nos va a proporcionar la representación del mundo exterior. 

El deseo refiere a un anhelo o aspiración, que posee un origen y una meta, así como diversos medios para su satisfacción. Los deseos de un individuo se vinculan con las prioridades y valores que posee, y con su personalidad. Por otro lado, tienen mucho que ver con la etapa de la vida que se transite, y con el contexto. El deseo es el motor del aparato psíquico. Es decir, es aquello que pone en marcha nuestra mente y con ello también nuestra conducta. El deseo surge de una falta generada por la demanda en su retroacción sobre la necesidad, es decir de una falta generada por el lenguaje mismo. El deseo de vivenciar diferentes estímulos nos permite afinar la capacidad sensoperceptiva y nuestra sensibilidad. Esta sensibilidad orientada a captar los estímulos y discernir, en el sentido de distinguir una cosa por otra para poder otorgarle un significado; una interpretación de la realidad. 

Adolph Von Menzel, Artist foot

En mi camino elijo lo que quiero sentir y lo que no, lo que veo y lo que oculto, lo que toco y lo que rozo, lo que huelo y lo que rechazo, lo que entono y lo que callo, lo que escucho y lo que silencio, lo que muevo y lo que detengo, lo que muestro y lo que reprimo. Mi huella se expresa a través de la luz, en su energía, tiempos y espacios, a veces dejo que brille y otras que se apague. En mis pasos cuento las historias de mis sombras y me anticipo al futuro manipulándolas. En mi pisada habitan las contradicciones.